Las Trampas Aparentes de la Novela
En el momento de relacionarse con este libro denso hay varias trampas.
Para empezar, en el lado exterior pasa poquísimo, que se puede resumir en:
Un hombre (Martim) huye después de creer haber matado a su mujer. Tras pulular solo por el desierto a lo largo de 50 páginas acaba en una granja en medio de la nada, llevada por una señora soltera de mediana edad (Vitoria). Solo viven allí cuatro personas más: Ermelinda, su relativamente joven pero no demasiada guapa sobrina que es viuda, una criada mulata con su hija y un empleado masculino. Martim solicita y se acepta como trabajador en la hacienda, ejecutando todo tipo de trabajos manuales durante un tiempo no de todo definido pero muchas días y muchas páginas; obedeciendo a las órdenes caprichosas de Vitoria. En algún momento se acosta de forma espontánea con la criada mulata por iniciativa de él, luego de forma más sistemática con Ermelinda por iniciativa de ella. No hay casi ningún diálogo, y los pocos que hay trascurren casi todos aparentemente en incomprensión mutua. La única persona que viene desde fuera hacia el final del libro es un maestro del colegio, llamado “el profesor” que ejerce como un especie de mentor intelectual a las dos señoras, y sirve ahora de eslabón para denunciar a Martim a las autoridades. Finalmente la policía viene por el y le llevan preso.
Como historia todo esto podría considerarse banal incuso aburrido, este es la trampa exterior del libro.
A lo largo de todos los sucesos, incluso los más sencillos, la novela intercala larguísimos monólogos interiores, en gran parte reproduciendo el flujo libre de pensamientos y sensaciones del hombre Martim y en menor medida los de Vitoria y de Ermelinda; a la vez que en un casi imperceptible “meta-plano” la autora comenta sobre estos procesos.
Perderse en este maraña de monólogos interiores, que forman la mayor parte del volumen del libro, es la trampa interior.
La aparentemente completa irracionalidad de muchas reacciones puede confundir más aún: situaciones normales, tristes incluso trágicas provocan euforia, mientras otras aparentemente insignificantes provocan pánico. Como colmo de estas valoraciones entrecruzadas tenemos en el punto central a un acto totalmente amoral, un asesinato, considerado varias veces como algo heróico.
¿Que hacemos pues con todo esto?
La interpretación cabalísica de Benjamin Moser
El historiador estadounidense Benjamin Moser da una posible interpretación en su biografía de Clarice Lispector titulado "Why this World", donde el capitulo 24 "Redemption Through Sin" (Redención a través de pecar) está dedicado a la novela que nos ocupa aquí.
Según Moser se trata de una gran alegoría cabalística, una re-interpretación de la creación del mundo donde un pecado inicial (el asesinato) conlleva un especie de locura constructiva (1)
El motivo personal detrás de este proyecto literario de reinterpretar un crimen lo ve Moser en el sentido de culpa de la autora por no haber podido curar con su nacimiento a su madre que tenía sífilis, contraído con ser violada en los pogromos de Ucrania desde dónde la familia procedía, y dónde existe una creencia supersticiosa en este tipo de curaciones milagrosas. (2)
En el final del capítulo se menciona el mito del golem, que procede del folklore judío, como importante fuente de inspiración estructural a la novela, siendo Martím un especie de golem que se va creando por etapas a lo largo del libro y su denuncia a la policía en el final del libro correspondiendo a su destrucción por haber vuelto peligroso.
La biografía de Moser es un gran trabajo académico, probablemente insuperable en todo que tiene que ver con los aspectos históricos y sociológicos alrededor de la vida de la autora retratada, en este respeto considero sus análisis y comentarios brillantes en todos sentidos. Sin embargo creo que con este interpretación de La Manzana en la Oscuridad y los posibles motivos personales subyacentes, se reduce la complejidad.
Moser está demasiado obsesionado con cuadrar todo dentro de su marco de interpretación cabalística. Su mensaje - en general en el libro y acentuado en este capítulo - es que a pesar de las formas aparentemente laicas de las novelas de Lispector, mucho de sus motivos y la manera de trabajar con ellos brota de la tradición mística del judaísmo; insistiendo en un fenómeno literario emparentado con las obras de Kafka y sobre todo de Espinoza. Por supuesto no niega que Lispector se haya distanciado claramente del judaísmo oficial; hechos son que se ha casado con un brasileño no-judío, no atendía regularmente a los rituales y se ha pronunciado expresamente contra las formalidades de su religión/cultura de nacimiento. Pero según Moser el mero hecho de haber crecido en el ambiente ha sido inspiración determinante que luego ha brotado desde ella de forma semi-latente.
Estoy completamente de acuerdo con Moser que las corrientes místicas del judaísmo (y por cierto también del cristianismo y del islam) no están en oposición real con las tradiciones ortodoxas sino los complementan de alguna manera.
Tampoco quiero negar que motivos de la Torá tienen un gran peso en exactamente la novela en cuestión, sin ir más lejos que las resonancias del título.
Luego la importancia de vivencias personales y los de los familiares y amigos más cercanos es también fuera de duda - en cualquier proceso creativo.
Sin embargo lo que sí me choca es la ausencia casi completa del nombre de Nietzsche en su análisis del libro, el único mención en el capítulo que aquí contemplamos de este pensador absolutamente clave es meramente anecdótica, citando otro novelista brasileño que recuerda con ella sus "discusiones filosóficas complicadas desde Espinoza a Nietzche" (3), pero Moser solamente utiliza esta cita para ilustrar que Lispector era un gran intelectual reflejada, o sea sus formas literarias salvajes no procedían de su ser anticultural sino eran logros artísticos conscientes.
Nietzsche y "su significado"
No soy un profesional, ni mucho menos, ni de literatura, ni de filosofía, ni de historia de religiones ni en nada de lo que trata este ensayo. Cuando me atrevo a criticar tan directamente a un investigador respetable es debido a una neta experiencia personal: al leer La Manzana el la Oscuridad he notado al espíritu de Así Habló Zarathustra flotar en el fondo. En las notas reproduzco una cita de Zarathustra que ilustra este sentimiento (4).
Googleando "Lispector - Nietzsche" me sale este libro; siendo en portugués desgraciadamente no puedo leerlo, pero el mero existencia de un libro con los dos nombres en el título indica, creo, que no ando de todo por un camino equivocado.
Y ¡ojo! no se trata de meros matices académicos. Iría tan lejos como decir que un análisis de la novela con o sin Nietzsche corresponde a encajar el proyecto entero de La Manzana en la Oscuridad en dos paradigmas completamente opuestas. Veamos porque.
Lo que hace la interpretación puramente cabalística/personal de Moser - con la importante nota añadida respeto al misticismo no siendo contraria a la ortodoxia - es acentuar la pertenencia a esta tradición, o lo que viene a ser lo mismo, que la obra de Lispector de cierto modo es un posible continuación de lo mismo.
Por el otro lado pronunciar o silenciar el nombre de Nietzsche es reconocer o no una transformación espiritual. Este es un proceso no coordinado por ninguna institución, pero que lleva madurándose desde la segunda mitad del siglo XIX. Diría que entre los pioneros de dicha renovación además del ya mencionado alemán también se encuentran el danés Kierkegaard y el ruso Dostoyevskij; luego en las siguientes generaciones por ejemplo el premio nobel H. Pontoppidan en Dinamarca y M. Bulgakov en Russia. También tienen un papel clave Simone Weil y Ludwig Wittgenstein, ambos viniendo curiosamente también de familias judías con cuya tradición ambos han roto. La lista contiene más nombres, he mencionado solamente una mezcla de los indispensables y los que han significado mucho a mi personalmente. (5)
Estoy bastante convencido que el proyecto literario y espiritual de Clarice Lispector se inscribe en este línea de renovación, es decir nuestra brasileña trabajaba de forma consciente en busca de una nueva espiritualidad. Visto así La Manzana en la Oscuridad es un especie de laboratorio: la autora crea y utiliza la novela como un espacio para investigar y sacar resultados; el crimen es una herramienta en la investigación. Dicho de otro modo: se ha creado "un sistema" algo retorcido pero a posta, á la cuando los biólogos crean mutaciones para a través de las desconfiguraciones en sus organismos modelos puedan investigar a la estructura genética.
En la segunda entrega del ensayo iré profundizando sobre este óptica e ilustrando con citas concretas de la novela, además de citas de Un Soplo de Vida, el libro póstumo de CL dónde el mismo proyecto es más claro aún.
Este interpretación no es completamente ajena al libro de Moser. Su ya citada frase "madness as positive tool for knowledge" podría señalar en este dirección; también cuando habla sobre la búsqueda de los poetas homosexuales cristianos entre los primeros fuentes de inspiración de Lispector; pero su énfasis de los motivos traídos de la tradición judía pesa mucho más en la biografía . Puede que en el plano personal ha ocurrido una acercamiento en diferentes momentos de la vida de la autora, pero esto es un asunto privado. En sus escritos, es decir en su legado intelectual/espiritual creo que los elementos monoteístas (hebreo o cristiano) son solamente algunos de los elementos en una construcción realmente nueva y más universal. La presencia de estos elementos tiene toda la lógica, ya que una verdadera transformación es siempre una reelaboración partiendo de lo ya existente y no un tirar de la tradición a la hoguera.
Notas
(1) "The madness in The Apple in the Dark is a positive tool for knowledge, not a means for self destruction." - Moser p 219
(2) “Clarice Lispectors obsession with crime stemmed from the guilt tied up with her existence: ”guilty from birth, she who was born with the mortal sin” ” - ídem. Más detalles en pp 28-29
(3) “Autran Dourado, one of Brazil´s leading novelists and intellectuals, recalls long Saturdays spent with Clarice in complicated philosophical discussions ranging from Spinoza to Nietzsche.” - Moser, p 227.
En todo el resto de la biografía solo hay una mención más que también es anecdótica, en la p167: “Even more than Venice, Clarice´s new home, Switzerland, was the ultimate land of artistic death. Here Thomas Mann and Nabokov came to expire; here Nietzsche and Nijinsky went mad.”
(4) "Ellos se vanaglorian de no mentir: mas la incapacidad de mentir queda muy lejos del amor a la verdad. ¡Guardaos de ellos!"
"¡La falta de fiebre queda muy lejos del conocimiento! Yo no creo a los espíritus refrigerados. Quien no sabe mentir, no sabe qué es la verdad"
Friedrich Nietzsche: Así Habló Zaratustra, Cuarta Parte, capitulo "Del hombre superior", IX.
(5) Fijemonons que en la lista hay novelistas (Dostoyevskij, Bulgakov, Pontoppidan) y genios del uso alternativo de la idioma (Kierkegaard, Wittgenstein). Lispector era los dos. A este tema también volveré en la segunda post del ensayo.
Literatura
- Clarice Lispector: La Manzana en la Oscuridad, Siruela, 2003 (traducido del portugués por Elena Losada)
- Benjamin Moser: Why This World - A Biography of Clarice Lispector, Haus Publishing 2009
- Friedrich Nietzsche: Así Habló Zaratustra. La cita en castellano está copiado de una edición baratucha de Alba Libros, 1998, traductor sin indicar. (lo he leído en danés)
Gracias a T.B. por inspiración esencial para este ensayo, i.e. por haber recomendado a leer a C. Lispector, la biografía de B. Moser y por discusiones libres alrededor del tema que en parte han alimentado a este texto.